Una de las piezas más peculiares del joyero de Ntra. Sra. del Amor y la Esperanza es el “Broche de la esmeralda”, una joya valiosa no solo por su valor material, sino por el gran amor y cariño devocional con el que fue ofrendada a la Stma. Virgen.
Se trata de un broche gemelo de otro que posee nuestra querida Hermandad del Silencio, y es que la intención fue la de encargar esta pareja de piezas, prácticamente idénticas, para cada una de las titulares de ambas corporaciones: Ntra Sra. del Amor y la Esperanza y María Stma. del Consuelo.
La idea de realizar esta pareja de broches nace de un grupo de jóvenes de ambas corporaciones en 2017. El diseño de la pieza fue realizado por Javier Barranco inspirándose en un óleo de la Inmaculada Concepción pintado por Ambrosio de Valois (Madrid, 1651-Jaén, 1720) que conserva en el Museo de la Catedral de Guadix. En concreto, se trata del broche con el que la Virgen sujeta el velo sobre su frente.
Las piezas fueron ejecutadas por el orfebre granadino Alberto Quirós y para su realización se contó con la donación de oro y plata de fieles y devotos y de piedras aportadas por n.h. Francisco Campra.
Los broches están realizados en plata chapada en oro y enriquecidos con brillantes de tres tamaños, uno de los cuales pende de la pieza dando sensación de movimiento. Preside el broche una gran esmeralda opaca engarzada con ocho garras. Las únicas diferencias entre ambas piezas radican en las esmeraldas centrales y en el texto de la lazada. En nuestro broche, la lazada lleva inscrita la letanía Consolatrix Aflictorum (Consuelo de los afligidos), en alusión al nombre de la titular de la Hermandad del Silencio. En cambio, el broche de María Stma. del Consuelo lleva en la lazada la inscripción Spes Nostra (Esperanza Nuestra).
Estas preseas fueron bendecidas el 29 de marzo de 2018, Jueves Santo, en la I.P. de San Agustín y al ser llevadas sobre el pecho de ambas imágenes marianas, vienen a reforzar la unión y fraternidad entre nuestra Hermandad y la Hermandad del Silencio.